María Del Pilar Nuñez

Cuando comencé mi carrera laboral en Atlas Copco como coordinadora de cobranzas, se presentaron muchos retos y desafíos debido a la pandemia del COVID-19. La administración y recupero de las cobranzas fueron indispensables en ese momento. Afortunadamente, fue una tarea que se asumió y controló exitosamente. Se tuvo que reforzar el perfil de socio estratégico de cara con el cliente, con actitud proactiva, y brindándoles facilidades, sin ir en contra de las políticas de la organización. Rescato mucho la relación que se pudo construir con el cliente interno, comprendimos que el generar un win-win sería un factor determinante para superar las contingencias. Gracias a ello, pude validar que el reinventarnos nos ayudó a salir airosos de muchas situaciones complicadas. 

En la actualidad, me desempeño como supervisora de finanzas en el área de Power Technique, y los principales retos son gestionar financieramente los procesos de cuentas por pagar, cuentas por cobrar, contabilidad y demás tareas inherentes al mismo.

Una de las principales tareas que tenemos como área es cumplir, en forma y tiempo, los procesos contables y financieros del área a cargo. El objetivo no es solo llegar a la fecha de cierre de cada mes, sino, mostrar información fehaciente, manteniendo el control de los gastos, costos y ventas, ya que todo ello ayuda a que las gerencias realicen la toma de decisiones.

Las oportunidades que encontré en Atlas Copco al ingresar como coordinadora de cobranzas fueron demostrar las habilidades adquiridas en mi experiencia profesional en empresas del rubro, lo cual ayudó al equipo a continuar con el cumplimiento de sus objetivos. Hubo espacios de mejora en el Grupo, lo que dio paso a mi adhesión como supervisora de finanzas, labor que desempeño de manera responsable, buscando oportunidades de mejora para realizar el trabajo de manera más eficaz y proactiva. Una de mis principales atenciones es minimizar las tareas repetitivas, a fin de invertir ese tiempo ganado en el área comercial y operativa, los cuales son socios estratégicos para la organización.

Lo que más gusta de mi trabajo es relacionarme con personas de todo el mundo, con distintas culturas, de quienes se puede aprender, compartir experiencias que estrechan lazos y crean amistades duraderas en el tiempo.

También me siento muy contenta de tener un líder que se preocupa de mi crecimiento profesional y que está pendiente de las necesidades que puedan demandar el trabajo cada día. Tengo la suerte de encontrar en él siempre una escucha activa.

¡Aprender! En estos casi 2 años aprendí mucho, crecí tanto a nivel personal como profesional. Una de las cosas más importantes para mí como profesional es seguir aprendiendo y superándome en esta empresa que significa mucho para mí. Atlas Copco me ha dado la oportunidad de demostrar mi capacidad, primero desde el área de cobranzas, y luego como supervisora de finanzas, demostrando así que la posición hace al profesional y no a la inversa.

Siento que Atlas Copco es una empresa que valora mi trabajo y me da las oportunidades para seguir mejorando y perfeccionando cada una de mis cualidades en cada actividad y reto que se presenta. Asimismo, Atlas Copco es una de las pocas compañías que ha demostrado mucha empatía con sus colaboradores con respecto a la pandemia, brindándonos muchas facilidades para que el trabajo a distancia sea adecuado para todos.

Además, ningún día es como el anterior. Cada día se aprende algo nuevo y el aprendizaje genera oportunidades. Yo lo veo como una llave que abre puertas a oportunidades que debemos ser capaces de identificar y aceptar el riesgo de tomarlas.