Una guía para la seguridad de los compresores de hidrógeno industriales
Trabajar con cualquier tipo de combustible supone riesgos, y el hidrógeno no es una excepción.
La principal amenaza es que se produzca una explosión si no se han tomado precauciones. Siempre que haya una fuente de combustible, "solo" se necesita oxígeno y una fuente de ignición (por ejemplo, una chispa o una fuente de calor) para crear una mezcla que pueda ser combustible.
Por este motivo, se deben seguir todas las características de seguridad y las prácticas recomendadas de los compresores de hidrógeno para garantizar que estos tres "ingredientes" explosivos se mantengan alejados entre sí.
Medidas técnicas y no técnicas
Existen dos formas de minimizar los peligros de la compresión del hidrógeno, que deben utilizarse conjuntamente para que el uso del gas sea lo más seguro posible.
En primer lugar, puede mitigar estos riesgos mediante la instalación profesional del compresor de hidrógeno en una ubicación segura.
En concreto, esto se refiere a una zona con buena ventilación. En los casos en los que los compresores se instalan en exteriores, también deben protegerse de los factores medioambientales, como la lluvia o la luz solar directa. Esto se puede lograr con una cubierta o colocando el compresor en un contenedor.
A la hora de seleccionar el compresor en sí, debe asegurarse de que cumple ciertos requisitos para proteger sus operaciones y su equipo de forma óptima.
Medidas de seguridad eléctricas
Los compresores con motor eléctrico deben cumplir los requisitos de clasificación eléctrica para equipos que funcionan en un entorno de hidrógeno (Zona 1, ATEX). Además, es importante asegurarse de que todos los equipos de hidrógeno estén conectados a tierra. Estos pasos reducirán las fuentes de ignición.
El espacio alrededor del compresor está clasificado como zona peligrosa y debe estar libre de posibles fuentes de ignición.
Para ello, debe consultar fuentes como la norma NFPA 70, el Código eléctrico nacional (NEC), el artículo 500 y la norma EN 60079-10-1: norma ATEX y clasificación de áreas con presencia de gas (ATEX). Tenga en cuenta que los componentes eléctricos utilizados para un sistema de hidrógeno deben cumplir los requisitos de la Clase 1, la División 1 o 2 y el Grupo B del NEC o los de la norma ATEX.
Todos los equipos que no están específicamente clasificados para su uso en requisitos peligrosos deben estar ubicados fuera de la zona especificada.
Prevención de fugas y acumulaciones de hidrógeno
Una vez que se han reducido las posibles fuentes de ignición, el siguiente paso es evitar una acumulación peligrosa de hidrógeno.
La ventilación pasiva que ofrece una instalación en exteriores será de gran ayuda. Sin embargo, también deben tomarse medidas de ventilación activa, como el uso de puertos de ventilación que liberan hidrógeno a una zona segura.
Nota: Los ventiladores deben estar fabricados con materiales que no produzcan chispas, como el plástico o el aluminio.
Para evitar la acumulación de hidrógeno, es importante detectar y prevenir las fugas.
Las piezas de desgaste de los compresores alternativos siempre producirán pequeñas fugas, por lo que la ventilación es importante.
Los compresores deben contar siempre con puertos de ventilación para permitir que las fugas de los retenes de gas se ventilen a una ubicación segura. Dicho esto, un sistema seguro debe incluir siempre detectores de fugas.
Como hemos mencionado anteriormente, las llamas de hidrógeno son invisibles, por lo que el entorno del compresor también debe contar con detectores de llamas especiales.
Para asegurarse de que todos estos sistemas de seguridad funcionan de forma conjunta, es mejor utilizar un controlador de compresores que pueda comunicarse con estos dispositivos de seguridad.
Nuestros compresores de gas se han diseñado específicamente teniendo en cuenta su seguridad.
La importancia del mantenimiento de los compresores de hidrógeno
Siempre que nos enfrentemos a un posible peligro, es esencial seguir el programa de mantenimiento recomendado y utilizar piezas de repuesto originales.
En el caso de los compresores de hidrógeno, esto implica realizar pruebas de detección de fugas, comprobar el flujo continuo de los sistemas de ventilación, realizar comprobaciones de las válvulas y los instrumentos, y asegurarse de que todos los equipos pertinentes estén calibrados correctamente.
Puesto que el hidrógeno puede hacer que los materiales se vuelvan frágiles, también debe comprobar periódicamente todas las conexiones para detectar signos de corrosión, erosión, grietas, protuberancias, ampollas o cualquier otra forma de deterioro.
Una solución de hidrógeno en contenedor lista para funcionar
Existen muchos factores que se deben tener en cuenta para proteger sus operaciones y su equipo de forma óptima de los peligros del gas hidrógeno.
Por lo tanto, ¿no sería genial que alguien pudiera entregar un sistema de compresores con todas estas características de seguridad directamente en sus instalaciones?
Atlas Copco ofrece soluciones de hidrógeno en contenedores listas para funcionar que incorporan todas las características y medidas de seguridad descritas anteriormente. Dicho de otra forma, no tiene que preocuparse de si el equipo está clasificado correctamente, si la ventilación es adecuada o si el controlador está conectado a detectores de fugas o llamas, ya que todas estas características y medidas están incluidas.