Si el oxígeno se sustituye por nitrógeno, se reduce el riesgo de incendio o explosión. La concentración máxima de oxígeno (CMO) es aquella por debajo de la cual una sustancia ya no puede arder. Reduciendo la concentración de oxígeno por debajo de la CMO se evitan explosiones y fuegos. (El nivel de CMO depende de la sustancia).