Características de la soplante que optimizarán su proceso de aireación
Airear correctamente su planta de tratamiento de aguas residuales es complicado. Más difícil aún es si quiere asegurarse de que lo hace de forma sostenible. Pongámonos un poco más técnicos. ¿Qué innovaciones debe buscar cuando su objetivo es la excelencia operativa? Entradas de aire independientes para el aire de refrigeración y el de proceso, filtros integrados, válvula de venteo e modulación y un controlador local son algunas de las características que debe tener en cuenta si desea optimizar su proceso.
Un flujo de aire eficiente
El aire de proceso entrante tiene que estar separado del aire de refrigeración. Esto significa que no tiene que precalentarse. El resultado son temperaturas de descarga más bajas. Las entradas de aire por separado hacen que su funcionamiento sea más rentable. Cuanto más baja es la temperatura del aire, más oxígeno contiene y añade al agua. Con una temperatura de descarga baja, necesitará menos aire y, por tanto, menos energía. Además, sus unidades pueden adaptarse fácilmente para permitir la canalización del aire de proceso desde el exterior de la soplante. Esto garantiza un funcionamiento más estable y fiable de la soplante, incluso en condiciones ambientales cambiantes.
No se necesitan filtros de entrada de aire independientes
Gracias a los filtros integrados de gran capacidad, el aire de proceso queda completamente filtrado. Esto garantiza que las partículas y el polvo no lleguen al difusor ni a los depósitos. Al mismo tiempo, elimina la necesidad de instalar in situ filtros de entrada de aire independientes. Esto le ahorra un tiempo valioso y evita que una posible instalación incorrecta dañe o contamine su soplante o los componentes aguas abajo.
Eficiencia, conectividad y facilidad de uso
Una característica especial de las plantas de tratamiento de aguas residuales es que la demanda de aireación fluctúa mucho en función de la estación o incluso de la hora del día. Una gran reducción de la velocidad garantiza que pueda hacer frente fácilmente a las grandes fluctuaciones del proceso.
Convertidor de frecuencia variable integrado
Un método habitual para disponer de un caudal variable suministrado por la soplante consiste en modificar la velocidad del motor principal para adaptarla a las necesidades del proceso. Integrar un convertidor de frecuencia variable le asegura el correcto funcionamiento tanto del motor como del convertidor de frecuencia para todo el rango de funcionamiento de la soplante. Además, podrá disponer de un rango de regulación más amplio de cada soplante.
Válvula de venteo
Una característica que hay que buscar es la válvula de venteo de modulación. No se limitará a abrirse y cerrarse para adaptarse a las condiciones de caudal mínimo, sino que controlará continuamente el flujo para favorecer el proceso de tratamiento en todo momento.
Monitorización de diferentes parámetros
Un controlador local le permite cambiar fácilmente los parámetros de funcionamiento y facilita procesos más estables. Además, un controlador local le garantiza el seguimiento de determinados parámetros del proceso y le ofrece más protecciones de la máquina en caso de situaciones inesperadas.
Los servicios avanzados de diagnóstico le ofrecerán recomendaciones sobre cómo puede optimizar el rendimiento de su equipo y reducir la energía que consume.