Gas y aire comprimidos para la fabricación de baterías de coches eléctricos

En la industria automovilística, el cambio de los coches que utilizan combustibles fósiles a los coches eléctricos se encuentra en pleno apogeo. De hecho, los gobiernos, los consumidores y los fabricantes de coches eléctricos comparten el objetivo de lograr un vehículo eléctrico que sea asequible, un coche que reduzca significativamente las emisiones de CO2 en comparación con los coches que usan combustibles fósiles y que reduzca el impacto medioambiental.

Cada coche eléctrico o híbrido necesita grandes cantidades de celdas de iones de litio que se montan en un paquete de baterías y se integran en los coches eléctricos.

Cada celda de la batería consta de varias partes, como el ánodo, el cátodo y el electrolito. Nuestro equipo está diseñado para ayudar en la fabricación de estas piezas: desde la explotación minera de materias primas hasta la preparación de estos materiales para utilizarlos en la celda de la batería.

Optimice su proceso de fabricación de baterías de coches eléctricos con la combinación correcta de los equipos más sostenibles; combine los compresores de aire y gas con los secadores, los filtros y los generadores de gas adecuados. Además, nuestra instalación proporciona un suministro constante de aire seco y libre de contaminación de alta calidad con los costes de ciclo de vida más bajos.

• Compresores de clase 0 para grandes demandas de aire y aire de calidad 
• Velocidad fija o accionamiento de velocidad variable 
• Secadores de adsorción y secadores con tambor: secadores regenerados por el calor de la compresión para niveles bajos de punto de rocío 
• Unidades de eliminación de CO2 para eliminar las trazas de dióxido de carbono no deseados del aire comprimido
• Filtros para eliminar todas las partículas hasta niveles aceptables
• Generadores de nitrógeno in situ para producir gases industriales por una fracción del coste de los gases licuados
• Unidades de recuperación de energía 
• Un controlador central para gestionar todos los procesos de una forma sostenible 

Las grandes redes de compresores, al igual que las orquestas, necesitan un director para que todos los equipos funcionen de manera conjunta lo más eficientemente posible.

El controlador central Optimizer 4.0 domina a la perfección la complejidad que supone controlar estas grandes redes de compresores.

El controlador central se encarga de monitorizar la demanda fluctuante de aire de manera ininterrumpida y selecciona automáticamente la configuración más óptima de varios compresores para que funcionen con el menor consumo de energía posible.

Aproximadamente el 94 % de la energía eléctrica se transforma en calor a través de la compresión.

• El calor adicional se puede utilizar para la calefacción de edificios o para el secado y el envejecimiento de materiales durante la fabricación.
• Otra opción es vender el calor a las industrias o ciudades cercanas. Esta energía renovable podría calentar viviendas u otros procesos industriales de forma que se ahorre energía.

Instale unidades de recuperación de energía que permitan reutilizar el calor de compresión en otros puntos del proceso. Esto disminuirá drásticamente el consumo de energía y reducirá aún más la huella de carbono del proceso de fabricación. Además, nuestras unidades de recuperación de energía garantizan un rápido retorno de la inversión.

El nitrógeno tiene diferentes aplicaciones para la fabricación de celdas de baterías de coches eléctricos.
Se utiliza tanto en la fabricación de los componentes de la batería como en el montaje de la celda de la batería, ya que las propiedades inertes y puras del nitrógeno evitan la contaminación de las materias primas. Estos son algunos ejemplos de uso:
 

• mezclar materias primas;
• enfriar materiales;
• inyectar electrolitos; 
• y prensar materiales mediante la creación de un entorno inerte.

¿Cómo ayudan nuestros generadores de nitrógeno in situ a reducir los costes operativos?
La generación in situ de gases industriales permite producir la cantidad y la pureza exactas necesarias para la aplicación, garantiza la disponibilidad de gases industriales con un coste bajo fijo y reduce las emisiones de CO2 significativamente. Además, ya no es necesario que proveedores externos entreguen los gases licuados en camión.