La recuperación de calor en un compresor

Es posible recuperar en forma de calor hasta un 75% de la energía transmitida al eje del elemento compresor, lo que supone una cantidad considerable de energía que puede ayudar a reducir la factura eléctrica de las empresas de manera indirecta.

Sin embargo, debemos tener en cuenta que esta energía térmica residual se genera cuando el compresor está en funcionamiento, no cuando se necesita.

Es por esta razón -y porque los compresores de aire son máquinas diseñadas para producir aire comprimido, no para funcionar como calderas- que debemos recurrir al calor de compresión como una fuente complementaria para reducir el consumo, precisamente, de aquellos equipos dedicados a calentar aire o agua.

En los compresores refrigerados por aire, el calor residual del compresor se transmite a través del propio sistema de refrigeración, pero este aire puede emplearse para calefactar una zona determinada de la planta simplemente reconduciendo el aire caliente a través de los conductos adecuados.

Además, en estos conductos de ventilación se pueden instalar compuertas con sensores de temperatura integrados. De esta manera, y en caso de ser necesario, sería posible automatizar la expulsión del calor indeseado de la sala de compresores. Este es el sistema de recuperación de calor más empleado en los compresores de tamaño pequeño porque las pérdidas energéticas son pequeñas y la inversión necesaria, también.

Los sistemas de recuperación de calor en el aceite se basan en la instalación de un intercambiador aceite-agua. Normalmente, estos equipos permiten que la energía térmica contenida en el aceite después de la compresión del aire se transfiera a otro fluido, generalmente agua, en el que se produce un salto térmico.

Con todo, este tipo de instalaciones solo son recomendables a partir de compresores de más de 15 kW porque la inversión inicial es mayor que en la recuperación del calor del circuito de refrigeración.

Es muy importante tener en cuenta que la cantidad de energía contenida en el aceite del compresor depende de muchos factores y que la transferencia térmica a otros fluidos está relacionada con el caudal y la temperatura de entrada.

Para una recuperación óptima, es recomendable que la temperatura de entrada del agua sea lo más baja posible. De esta manera, se producirá un salto térmico mayor y, por lo tanto, también mayor será la recuperación de la energía consumida.

Los equipos de recuperación de calor de Atlas Copco pueden integrarse en el compresor de aire en el momento de su adquisición o pueden suministrarse e instalarse en equipos existentes.

En el caso de los segundos, los recuperadores pueden ser tanto externos como internos (incluido dentro del propio compresor) y se diseñan en función de cada compresor con el objetivo de maximizar la recuperación de la energía presente en el aceite.