La seguridad es un aspecto fundamental del éxito de cualquier actividad de construcción. Es por ello que en las obras se dispone de iluminación adecuada para el entorno. No obstante, los operadores necesitan equilibrar esta necesidad con la oferta de soluciones sostenibles y que permitan reducir los gastos, además de cumplir con las pertinentes disposiciones en materia de ruido, intensidad lumínica y emisiones de CO2. Por suerte, las torres de iluminación de hoy en día se han diseñado para ayudar a las constructoras a abordar estas dificultades concretas. A continuación analizamos cinco maneras en las que las torres de iluminación pueden ayudarle a disminuir sus emisiones de CO2, cumplir con la normativa en vigor y disfrutar de muchas otras ventajas.
Torre de iluminación solar HiLight S2+
El sector de la construcción es una fuente significativa de emisiones de CO2. La investigación ha calculado de manera estimada que supone más de un quinto del total de las emisiones mundiales. Teniendo esto en cuenta, los avances tecnológicos permiten fomentar operaciones más ecológicas, incluida la iluminación. Tradicionalmente, las torres de iluminación se han alimentado mediante un motor diésel. No obstante, hoy en día hay disponibles más alternativas respetuosas con el medio ambiente para adaptarse a diversas necesidades. Los modelos exclusivamente eléctricos pueden aprovechar el suministro de la red, con lo que deja de ser necesario consumir diésel. Por otra parte, las opciones LED de baterías de iones de litio pueden combinarse con fuentes energéticas renovables para disfrutar de una solución libre de emisiones al 100 %. En función de la tecnología que se emplee, es posible reducir drásticamente las emisiones de CO2. Por ejemplo, la torre de iluminación solar HiLight S2+ de Atlas Copco permiten a los usuarios reducir sus emisiones en hasta seis toneladas en comparación con las tecnologías tradicionales, además de estar totalmente exentas de emisiones de ruido. Los paneles solares, que pueden extraerse de la carrocería de la torre y ajustarse para alinearlas con el sol, permiten un funcionamiento autónomo si la productividad solar supera la demanda.
Torre de iluminación HiLight H6+
El tipo de luces que se empleen en la torre también puede suponer una gran diferencia. Los reflectores LED son más eficientes, tienen una vida útil de 50 000 horas y son capaces de ofrecer una distribución lumínica óptima para abarcar un área de hasta 6000 m2. Aunar todas estas características en una misma torre de iluminación da como resultado la HiLight H6+ de Atlas Copco, una torre de iluminación diésel que permite a los usuarios reducir su consumo energético y sus emisiones de CO2. Además, los reflectores LED atenuables ayudan a garantizar que las luminarias ofrezcan la intensidad lumínica adecuada para cada situación y hora del día. Esta tecnología ayuda a reducir las emisiones de CO2 en hasta un 40 por ciento y prolonga la autonomía energética de la HiLight H6+ a hasta más de las 300 horas.
Suele considerarse que las tecnologías sostenibles son más caras, lo cual no es cierto. Incorporar tecnologías más respetuosas con el medio ambiente en el diseño de las torres de iluminación puede contribuir a reducir el coste total de propiedad gracias a la disminución del gasto en repostaje, a su mayor eficiencia energética y al uso de alimentación renovable (que puede llegar a ser incluso gratuita en el mejor de los casos). Otros aspectos del desarrollo de productos, desde el aprovechamiento de las capacidades de almacenamiento de las baterías de iones de litio, de gran densidad energética, hasta la reducción al mínimo de los gastos en mantenimiento, pueden fomentar la recuperación de la inversión en poco tiempo.
No debe infravalorarse el papel que puede desempeñar el contar con la iluminación adecuada en la consecución de un entorno de trabajo seguro. Disponer de torres de iluminación capaces de iluminar la obra durante el horario nocturno o el atardecer ayuda a garantizar que los trabajadores lleven a cabo sus labores en las debidas condiciones de seguridad al tiempo que favorecen la productividad, gracias a la prolongación de las horas de trabajo. En la mayoría de países, el grado de intensidad lumínica está dispuesto por ley y las diferentes actividades cuentan con distintos requisitos en lo que a iluminación respecta. Por ejemplo, en el Reino Unido, la Asociación de Salud y Seguridad Laboral (Occupational Safety and Health Association, OSHA) dispone que para los trabajos de construcción en general se necesita una iluminación de como mínimo 32 lux. Otros entornos más exigentes, como la construcción de vías férreas, requiere de luminarias más potentes, capaces de suministrar 50 lux. Trabajar con un fabricante de confianza puede ayudar a garantizar que las torres satisfagan las necesidades de la aplicación correspondiente. Además de la seguridad personal, una iluminación adecuada también puede ayudar a garantizar la seguridad de la obra fuera del horario laboral y reducir el riesgo de robos y accesos no autorizados.
Cumplir con las distintas normativas que rigen el trabajo en entornos de construcción puede ser una tarea compleja, en particular en el centro de las ciudades. A menudo existen restricciones con respecto a los niveles sonoros y de contaminación permisibles, por lo que encontrar maneras de optimizar la productividad puede que no sea sencillo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado la calidad del aire y el ruido como las principales causas ambientales de problemas de salud, por lo que la necesidad de que se regulen es indudable. Por suerte, algunas de las torres de iluminación más avanzadas cuentan con un funcionamiento casi totalmente silencioso y no producen emisiones. Cumplir con las normativa sobre emisiones, como Stage V, suele ser relativamente sencillo, gracias a que las torres de iluminación funcionan principalmente con motores de menos de 90 kW. En lo que al exceso de contaminación acústica respecta, muchos de los principales fabricantes, como Atlas Copco, ya lo tienen en cuenta desde la fase de diseño. HiLight S2+ es la más silenciosa del mercado, con un nivel sonoro de tan solo 55 dBA a siete metros de distancia, de esta forma, los usuarios podrán disfrutar de una iluminación sin emisiones y sin ruido alguno.
Como ya hemos observado, la iluminación es un segmento que gracias a su rápido desarrollo ha permitido contar con soluciones que abordan muchas de las dificultades de hoy en día, al tiempo que ayudan a los operadores a incrementar la rentabilidad y disfrutar de un coste total de propiedad más reducido. Es por ello que muchas constructoras que se adelantan al futuro están estudiando la manera en la que usas torres de iluminación para encontrar maneras de incrementar la sostenibilidad y fomentar la productividad, la seguridad y la eficiencia en sus obras.
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