Cómo encontrar el soplante de aireación adecuado
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Elegir el tipo adecuado de soplantes de aireación para su planta de tratamiento de aguas residuales no es solo algo extremadamente importante, sino que también supone un gran desafío. Por eso hemos elaborado algunas directrices. El objetivo es ayudarlo a encontrar los soplantes de aireación óptimos para sus necesidades específicas, para que se haga una idea de las preguntas que debe formular y la información que debe tener a su disposición cuando hable con su socio de aire comprimido.
Muchas opciones, muchos desafíos
En primer lugar, hay algunas noticias buenas y otras menos buenas cuando se trata de elegir el soplante de aireación adecuado: hay muchos productos diferentes a su disposición, cada uno con diferentes pros y contras, lo que significa que muy probablemente encontrará uno que satisfaga sus necesidades.
Pero esta gran cantidad de opciones también puede suponer un desafío, especialmente porque hay mucho en juego. Su instalación debe ser capaz de suministrar la cantidad correcta de aire comprimido para que pueda cumplir las normas de purificación. Para que esto suceda, lo primero que hay que tener en cuenta es el tamaño del soplante de aireación. Hay que analizar algunos parámetros:
La presión de trabajo viene determinada principalmente por la profundidad del depósito. Cuanto más profundo sea el depósito, mayor será la presión de aire que el sistema necesita. Esto afecta al tipo de tecnología del soplante de aireación que más le conviene. Cuanto mayor sea la presión, mayor será el potencial de ahorro energético.
Muchas plantas optan por soplantes de lóbulos rotativos exentos de aceite. A presiones muy bajas, de hasta 0,3 bar(g), no se gana mucho en cuanto a eficiencia. Por tanto, en términos de eficiencia y costo de inversión, podrían ser la opción adecuada para su planta.
Sin embargo, a mayores presiones, las opciones son menos limitadas y se puede elegir un tipo de soplante más eficiente energéticamente. Incluso con un aumento de, por ejemplo, 0,8 bar(g), la diferencia de consumo energético entre, por ejemplo, la tecnología de tornillo y la de lóbulos puede llegar hasta el 30 %..
La capacidad de caudal del diseño es otro factor importante. Viene determinado por el tamaño de su planta, principalmente. Si un soplante no puede alcanzar la demanda requerida, no podrá tratar todas sus aguas residuales. Por lo general, cuanto mayor sea el caudal, mayor será el ahorro potencial. Los soplantes de lóbulos, por ejemplo, son la solución preferida para caudales más pequeños, mientras que los turbosoplantes están equipados para manejar caudales más grandes (y, por lo tanto, plantas de aguas residuales de mayor tamaño).
La capacidad de un soplante para regular el volumen de aire es un parámetro importante cuando se trata de una demanda de aire variable. Dado que la mayoría de las plantas de tratamiento experimentan muchas fluctuaciones en la demanda a lo largo del año e incluso a lo largo del día, es muy importante que el soplante de aireación pueda reaccionar a estos cambios.
Algunos soplantes están mejor preparados para hacer frente a estos caudales fluctuantes. Los soplantes preparados para funcionar con un accionamiento de velocidad variable (VSD) son siempre una buena opción. Puede optar por utilizar su propio VSD externo o elegir una unidad con un VSD integrado. Las unidades de lóbulos, de tornillo y de rodamientos magnéticos son las mejores opciones en cuanto a tecnología, ya que cuentan con una mayor capacidad de reducción en comparación con otras tecnologías.
¿Prefiere un paquete "plug & play" o quiere montar su propia solución? Ambas opciones tienen sus ventajas e inconvenientes.
Una verdadera solución "plug & play" simplificará la instalación y le permitirá ponerla en marcha inmediatamente. Tenga en cuenta que cada fabricante de soplantes tiene su propia definición de lo que es un paquete completo. Por ejemplo, un filtro de entrada de aire de proceso es un elemento indispensable.
Si decide que una unidad con tecnología turbo es la adecuada para usted, necesitará un silenciador de descarga. Todos estos son componentes son necesarios para comenzar a funcionar, pero algunas marcas no los incluyen en sus paquetes estándar. Por otro lado, algunos elementos pueden reutilizarse, lo que significa que no es necesario volver a comprarlos. Por ejemplo, puede reutilizar la válvula de retención o un compensador de salida de aire. Añadirlos al paquete solo aumentará el costo de su inversión.
El emplazamiento importa
Hay otro conjunto de variables relacionado con los requisitos específicos del emplazamiento. Esto no solo afecta a sus instalaciones, sino también a las condiciones ambientales, lo que puede afectar a la selección de la solución de aire comprimido ideal:
Si lo que busca es una sustitución, es posible que trabaje con una sala de compresores fija que no puede ampliarse. Esto ofrece mucha menos flexibilidad en lo que respecta al número físico de unidades y a las dimensiones de las soplantes. También es posible que ya tenga instalado un convertidor de frecuencia independiente. Sin embargo, ahora muchos soplantes tienen uno integrado, por lo que tendrá que decidir qué opción prefiere.
Por un lado, invertir en soplantes con un VSD integrado simplificará la instalación (menos trabajo eléctrico y de programación) y le permitirá controlar mejor las unidades. Además, podrá sacar más partido a sus unidades, ya que tendrán un mayor alcance de caudal con un mayor rango de regulación. Por otro lado, el costo de inversión de este tipo de unidades es ligeramente superior (en comparación con las unidades preparadas para VSD).
Asimismo, las horas de funcionamiento de los diferentes procesos y el número de veces que los soplantes tienen que arrancar y parar también desempeñan un papel importante. Algunos procesos se ejecutan continuamente durante todo el año. En ese caso, la eficiencia y los intervalos de servicio prolongados son extremadamente importantes.
Otros solo funcionan parte del día. Algunas unidades sencillamente no están diseñadas para hacer frente a arranques y paradas frecuentes. Las tecnologías como lóbulos, tornillo o rodamientos magnéticos de alta velocidad son las más adecuadas para arranques y paradas frecuentes.
En las zonas residenciales, deberá tener en cuenta el nivel de ruido de su equipo. Los soplantes de aire y los compresores pueden tener fama de ruidosos, pero no tienen por qué serlo. Al diseñar una unidad nueva, se tiene en cuenta el nivel de ruido. Normalmente se mide, se prueba y se indica en las especificaciones para que sepa qué unidades serían buenas vecinas.
Si su instalación está realmente alejada, también debe considerarse un acceso fiable al servicio y al mantenimiento. En ese caso, sería especialmente importante elegir un soplante que sea fácil de mantener y con intervalos de servicio prolongados.
La elección del equipo también dependerá de si los soplantes se van a instalar en exterior, cerca del punto de uso o en interior. Obviamente, si los soplantes se colocan en el exterior, la robustez es un requisito clave. Pero las heladas, el calor extremo, la lluvia o todo lo anterior hacen que su unidad necesite una protección adicional. Un kit de acondicionamiento para el invierno o un toldo para exteriores suelen ser elementos opcionales.
Otro factor a tener en cuenta es los requisitos de respaldo de su planta de tratamiento de aguas residuales. En este caso, es importante pensar en la capacidad operativa y de respaldo que necesita y no en el número de soplantes: podría sustituir su instalación actual por menos soplantes que le proporcionen la misma capacidad (de respaldo).
Un controlador integrado es una excelente manera de supervisar las condiciones de funcionamiento de sus unidades y recibir automáticamente alertas en su teléfono o a través de su sistema SCADA. El controlador adecuado puede mejorar enormemente la fiabilidad de sus soplantes con opciones de mantenimiento predictivo y preventivo.
Si va a sustituir un grupo de soplantes, puede que sea el momento de actualizar a un sistema de control central más avanzado. Un controlador central es fácil de instalar y programar, ya que reduce en gran medida la complejidad que conlleva la programación del PLC. También garantiza que una o varias unidades funcionen siempre de la forma más eficiente.
Por qué la forma fácil de elegir una soplante de aireación suele ser errónea
Si sustituye su soplante actual mirando solo la placa de datos, se perderá una gran cantidad de posibles mejoras en cuanto a eficiencia o fiabilidad. Si recopila la información mencionada anteriormente, estará bien preparado para comparar las diferentes ofertas del mercado en términos de compatibilidad con su proceso.
Una vez hecho esto, puede comenzar a estudiar otros factores importantes, como el aspecto financiero. ¿Quiere mantener bajos los costes de la inversión inicial pero pagar más por la energía más adelante o le resulta más importante el coste total de la propiedad, es decir, el ahorro energético posterior? Según cuál sea su respuesta, la solución óptima podría ser otra.
Su lista de comprobación para comparar soluciones:
- Presión de trabajo
- Capacidad de caudal
- Capacidad de regulación
- Dimensiones de la unidad
- Intervalos de servicio
- Opciones para exterior (si es necesario)
- Paquete y accesorios: ¿qué se incluye?
