Por último, todos los componentes internos de la batería del vehículo eléctrico están en su posición y ha llegado el momento de sellar la bandeja de la batería. El sellado de la tapa es necesario para evitar fugas que puedan reducir el rendimiento de la batería o suponer un riesgo para la salud. El reto consiste en sellar herméticamente la tapa y, al mismo tiempo, garantizar la facilidad de mantenimiento de la bandeja de la batería de cara al futuro.
Junta reversible para problemas de mantenimiento
La humedad que penetra en la bandeja de la batería puede dañar el sistema de la batería del vehículo eléctrico y hacer que el rendimiento de la batería se deteriore drásticamente, lo que puede provocar corrosión. Por otro lado, se generan gases tóxicos peligrosos dentro de la batería que pueden ser nocivos si penetran en el habitáculo. La conclusión es que la tapa debe estar bien sellada para que no entre ni salga nada durante la vida útil de la batería. Esto tiene una excepción: la junta debe ser reversible para que la batería se pueda reparar en caso de que sea necesario.
Nuestra línea de productos de dispensación SCA permite aplicar sellador tanto en la tapa como en la bandeja de la batería. Puesto que la batería no puede exponerse al calor, se suele utilizar un material de butilo caliente 1C (un componente) para la aplicación de sellado de la tapa. Debido a sus características reversibles, se pueden realizar futuras tareas de mantenimiento y reparación de la batería. Otras opciones de materiales son el poliuretano 2C (dos componentes) o la silicona 2C, que no requieren curación en horno.
Aplicación de butilo caliente con sistemas de dispensación SCA
Independientemente del material, la aplicación debe ser uniforme. Es especialmente importante que el principio y el final del cordón se coloquen con precisión para garantizar un sellado hermético.
El butilo caliente debe calentarse hasta 160 ºC, lo que requiere un sistema de dispensación con calefacción completa para que el material altamente viscoso se aplique correctamente. Se trata de una operación compleja para la que contamos con la experiencia y la solución adecuadas. Nuestros sistemas de dispensación SCA permiten un templado fiable del material desde la bomba hasta el medidor y el aplicador. De este modo, se aplica el butilo caliente con la viscosidad y la presión adecuadas, lo que permite una aplicación uniforme con un inicio y un acabado precisos del cordón.
Reducción de los desechos y las rectificaciones
La incorporación de un sistema de visión integrado al proceso de sellado de la tapa facilita la monitorización y las rectificaciones en línea, la inspección y la medición, por lo que es posible controlar el nivel de calidad en todo el proceso de sellado de la tapa. A su vez, esto ayuda a reducir los desechos y las rectificaciones, aunque también aumenta la estabilidad del proceso.
El resultado del sistema de dispensación combinado con un sistema de visión integrado garantiza un sellado hermético perfecto de la tapa que evita la entrada de humedad y la evaporación de gases. Todo ello al tiempo que se garantiza el mantenimiento de la batería, la reducción de los residuos y la minimización del riesgo de rectificaciones, ya que aumenta la estabilidad del proceso de sellado de la tapa de principio a fin.
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